Ausencia.

Esperaba a tu boca visitando la mía. O tus brazos visitando mi cintura... Pero... Nada.
Esperaba tantas cosas de ti. Tantas cosas de mí. Tanto de nosotros.
Quiero saciar esta sed de perfección y felicidad.
No una perfección perfecta, no una ya establecida, no una ya pensada, no. Quiero una perfección única, tuya y mía, nuestra. Una perfección tan íntima como tu mirada en las madrugadas de marzo, de noviembre, de una eternidad.
Quiero volver a sentirte en mis brazos, saber que estás ahí a mi lado y que nada puede herirme, sentirnos invencibles, sentirnos infinitos. Éso quiero.
"Desear no es querer. Se desea lo que se sabe que no dura. Se quiere lo que se sabe que es eterno." -Rousseau.
Eres mía, mirada apasionada. Eres mío, corazón delator. Eres mía, sonrisa indescriptible. Eres nuestro, recuerdo y pasado.

¿De qué me sirve buscarte si ya te tuve? ¿De qué me sirve pensarte una y mil noches enteras si no estás? ¿De qué me sirve pensarte si no me piensas?

No puedo describir de manera lógica la falta que le llegas a hacer a mi alma.
¿O es que acaso puedo negar que te extraño? Nunca jamás.
Te extraño, te quiero conmigo.

Yo puedo respirar sin ti, pero mis pulmones no resisten demasiado sin tu respiración en mi boca.
Yo puedo vivir sin ti, pero mi corazón se acostumbró a tu lento y tranquilo palpitar cuando te recostabas en mi pecho.
Yo puedo caminar sin ti, pero mis piernas no resisten la ausencia de las tuyas enredadas en ellas.
Yo puedo. Pero no.

Mis lágrimas son tan insoportables como inevitables.

No pido que entiendan mi dolor, ¿para qué? 
Pido que me devuelvan su sonrisa cuando me veía llegar.

Pido que me devuelvan sus mejillas rojas cuando le digo cuán hermosa es su mirada para mí.
Pido que me devuelvan sus labios rosados, delicados, insensatos.

¡Que me devuelvan mi amor! 
Vuelve, por favor. Por la propia ausencia de mí. Por nuestras memorias. Por nuestros pasados. Por nuestros futuros.

¿Que te pido mucho? No dejaré que te pierdas una vez más de mi vida. Un error no lo cometo dos veces, espero.

¿No me quieres más en tu vida? Dímelo pero despacito, con cautela y precisión. Ya muchas cicatrices hay, no quiero que tú quedes como una mala que jamás curó.

Te quiero feliz, te quiero alegre, te quiero viviendo la vida con alegría.

"Trataré de no robar sonrisas, de no conquistar corazones, de no ser." -K.


Ya no tiene fundamento mi mirada enamorada. La guardaré para una próxima ocasión. (Contigo)

A ti, en realidad, hasta la próxima, amado mío. No me olvides.


<<Inspirada en muchas bonitas historias de amor que alguna vez conocí.>>

Comentarios